Ayer se celebró el "día internacional de la mujer". Porqué necesitamos destinar un día al año a las mujeres cuando no lo hacemos el resto , es una cuestión a responder.
En mi país, la mujer ha empezado a ser considerada como sujeto con iguales derechos, que el hombre, a partir de la Constitución de 1978, vigente en la actualidad. Reflejados en el capítulo segundo, en los derechos y libertades, el artículo catorce dice:
“los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.
Cuando una Constitución tiene que recoger, en un artículo, la igualdad ante la Ley sin discriminación por sexo, es porque a lo largo de los años anteriores, esta igualdad no ha existido. Y ni en siglos anteriores tampoco.
“los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.
Cuando una Constitución tiene que recoger, en un artículo, la igualdad ante la Ley sin discriminación por sexo, es porque a lo largo de los años anteriores, esta igualdad no ha existido. Y ni en siglos anteriores tampoco.
Llevamos años de retraso en la consolidación de derechos para la mujer, en relación a otros países de nuestro entorno, pero ciertamente hemos ido avanzando, de manera lenta pero eficaz, en los últimos 30 años, con paradas y lagunas conforme a quienes nos gobernaban.
No tenemos una igualdad total ni por asomo, pero estamos en una posición de avance.
Que tiene de especial el día de ayer, que quizás sea el último año que podamos celebrar este día con todos los derechos adquiridos a lo largo de estos años para las mujeres en mi país, habida cuenta de las reformas estructurales que se están llevando a cabo y las que quedan por llegar, y que están tocando derechos básicos y derechos luchados y ganados, que ya están afectando a los hombres pero muy especialmente a las mujeres, a los niños y a los adolescentes.
Por ello quiero hablar de la mujer y decirle que:
Ella misma, en su naturaleza, es parte fundamental del Todo. Es la creación de la vida. La mujer es la fuerza gregaria que ha hecho posible la evolución, el progreso, desde su posición de retaguardia o en primera línea. Es capaz de convencer y vencer en un mismo acto. Es el orden en el caos masculino.
Es la autora material del amor, de la dulzura, del querer. Es la madre de todos y de todas. Es el equilibrio en el día a día. La capacidad de comprender más allá de lo incomprensible. Es el deseo, la presencia. Es la paz y la reserva, el recato y el anonimato.
La mujer posee habilidades y estrategias que le permiten sobrevivir en un mundo pensado y actuado por hombres .
Su inteligencia emocional es tan alta, que le ha permitido moverse en diferentes contextos a lo largo de la historia, adaptarse , ser presencia o estar ausente y sacar partido de ello.
Su capacidad de aguante personal, de sacrificio, le ha valido más de un disgusto, pero le ha servido para poder seguir adelante.
Es camaleónica. La mujer es belleza, es alma, es la vida.
Puede ser lo que se proponga, lo que quiera ser. Es economista sin titulación, lo que la hace más cercana a la realidad y más certera en sus decisiones.
Sin ella no existiríamos, ni seríamos.
Me gustaría ver más mujeres dirigiendo el mundo, sólo así podría saber si lo que pienso es cierto.
Hasta luego
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